Consejo N° 1: Desarrollar buenas prácticas al momento de comer
El primer paso que debemos poner en práctica para tener una alimentación que nos permita mantenernos saludables, es dedicar tiempo de calidad para llevar a cabo la acción de comer, ya que es muy importante comer sentados y relajados, y no comer caminando y apurados.
En segundo lugar, nuestra masticación es fundamental, por eso comer lento y masticar minuciosamente, hace que nuestro organismo procese de forma más eficaz cada alimento que ingerimos.
También es importante evitar comer entre comidas, ya que esta acción tan instalada en nuestras vidas desorganiza no solo nuestros hábitos, sino que además es contraproducente para nuestro metabolismo, debido a que el cuerpo está permanentemente trabajando para procesar los alimentos y no tiene las pausas necesarias.
Algo que también nos suele suceder con frecuencia es comer con el estómago contraído, esto es realmente nocivo. Así que, si te encuentras preocupado o ansioso por motivos personales, laborales o de otras índoles, la recomendación es posponer tu almuerzo o cena e ingerirlos cuando tu cuerpo esté en condiciones de recibir y procesar los alimento como corresponde. Además, es aconsejable resguardar el disfrute de una rica comida.
Por último, el alimento es nuestro combustible, por eso las comidas principales comidas son el Desayuno que nos da el impulso del comienzo de jornada; y el almuerzo que harán de nuestro desempeño un buen rendimiento. Para el momento de la cena, en que nuestra prioridad será un buen descanso, lo recomendables es reducirla a un plato liviano de verduras y frutas, de esta forma tu estómago no estará tan exigido y podrás descansar más placenteramente.
Consejo N° 2: Consumir alimentos que permitan alcanzar un peso saludable
Lo ideal es que proveamos a nuestro cuerpo con una serie de alimentos que aporten menos calorías de las que quemamos habitualmente, de esta forma las calorías que están en reserva o excedidas serán requeridas por nuestro organismo, que buscará el faltante en ese sobrepeso que queremos erradicar.
Los alimentos ideales para este desafío son las hortalizas, las verduras y las frutas. Estos alimentos aportan un porcentaje muy bajo de calorías y colaboran en el equilibrio de nuestro peso saludable.
Ahora bien, saludable y caloría no son términos encontrados ya que los alimentos calóricos o de elevada densidad energética son necesarios para nuestro cuerpo y para nuestra salud. Entre ellos encontramos: aceites esenciales (oliva y semillas), frutos secos oleaginosos (almendra y nueces) y frutas desecadas, entre otros, los cuales deben consumirse, pero en cantidades muy reducidas.
Los alimentos no saludables, o por lo menos no recomendables para quienes buscan mantener un peso saludable, son: Ultraprocesados, frituras, embutidos, pasteles y chocolates.
Consejo N° 3: Lograr un equilibrio calórico como clave para nuestra salud
Nuestro organismo necesita para estar saludable una variedad de calorías que tengan diversas procedencias. Erróneamente se cree que las calorías que se ingieren en una dieta deben proceder solamente de las proteínas o de las grasas, sin embargo, lo ideal para que nuestro cuerpo mantenga un porcentaje equilibrado y diverso es llevar una dieta sana y equilibrada en la que las calorías procedan de los tres tipos de nutrientes energéticos, es decir, un 40% de los carbohidratos, 33% de las grasas y 27% de las proteínas.
De esta manera podemos lograr nuestro objetivo de reducir el sobrepeso, pero sin descuidar el aspecto saludable y nutricional.
Consejo N° 4: Consumir alimentos que ayudan a mejorar la alimentación y son saciantes
Afortunadamente hay alimentos que pueden ayudar a mejorar nuestros hábitos alimenticios y por lo tanto eliminar el sobrepeso de nuestras vidas. Esos alimentos que por sus características son ricos en fibras y logran que al ingerirlos nuestro organismo perciba saciedad y sean bajos en calorías.
Dentro de este grupo se encuentran las algas, los tubérculos y algunas frutas como las cerezas, también es recomendable sopas, avena, vegetales entre otros, además de la carne de ternera, pollo y pescado.